pensamiento de caracol
ojalá ojalá
Ya estamos en mi semana preferida del año. El tiempo se pone medio en cámara lenta. Año nuevo parecía estar ahí nomás y te das cuenta que todavía falta el 26, 27, 28, 29, 30, 31 de diciembre. Una eternidad. Me siento un caracol como la canción del Príncipe que está sonando: “Muy despacito me voy moviendo pero sé bien en qué dirección”.
También ya pasó navidad y si no compraste regalos no los compraste, y si los compraste estuvo bien. Ya tomaste sidra y tal vez fuiste a esa fiesta que te invitaron muy cerquita de tu casa sabiendo que tal vez era medio mala. O tal vez no hiciste nada de esto. En mi caso, fue buena idea el consejo de no tener expectativas de celebración gigantes e ilusionarme con comer rico, con charlar y con dibujar con mi sobrino. Qué más podría querer. (Aunque sí fui a esa fiesta en esa casa y bailé un poco con mis amigas cata e isa). Pero sí, definitivamente ahora todo está más tranquilo. La ciudad más quieta y yo también.
Ojalá logre escribir muchas canciones este verano. Me entusiasma esa idea. Y también la idea de escribir cosas que no son para cantar y de pintar cosas que no se pueden escribir. Enero es una hoja en blanco que me entusiasma. En navidad me hicieron una especie de oráculo con unas tarjetas de animales. Sacabas una carta al azar sin mirar y te tocaba un animal que te representa. Me tocó la golondrina. El librito con las explicaciones decía que son símbolo de entusiasmo y un “espectáculo de sutileza”. La tarjeta me aconsejó que “abra las alas de la sinceridad y vuelva al nido del corazón”. Bueno, la sinceridad siempre me gusta y el concepto del corazón como un nido mío al que puedo volver, me sirve. Me quedo con el entusiasmo, la sutileza y el corazón nido.
Se puso otra canción de Gustavo Pena y suena esta parte que es perfecta para ahora:
llega otro año
que se somete a la espera
de que se haga verdadera
tu locura y tu ilusión
bueno, ojalá este verano pueda escribirles varias cartas
ojalá qué se les cumplan las locuras y las ilusiones
y ojalá sean un poco golondrina
entusiasmada y sutil.
con cariño,
sofi